QUINTO DOMINGO DE CUARESMA - CICLO B 18 de marzo
Hermanos,
nos acercamos ya a los días de la muerte y la resurrección del Señor. Él es el
grano de trigo que cae en tierra y muere, para dar mucho fruto. Él es el que
será elevado en la cruz para atraer la mirada de la humanidad entera. Y
nosotros, que una vez más nos reunimos en este domingo para alimentarnos de su
pan de vida, reafirmamos hoy nuestra fe y nuestra esperanza en Él, y nos
disponemos a acompañarlo en su camino. Pongámonos de pie y recibamos cantando
al sacerdote, que hoy presidirá nuestra celebración.
MONICIONES A LAS LECTURAS
Opción 1: Monición única para
todas las lecturas
La
carta a los Hebreos nos habla de "gritos y lágrimas" de Jesús ante la
certeza de su muerte. El evangelio nos recuerda otro momento de
"crisis" de Jesús ante la "hora" dramática que ve
acercarse, aunque triunfa su voluntad de obediencia al plan salvador de Dios,
con la hermosa imagen del grano de trigo que, para dar fruto, tiene que
enterrarse y morir.
Opción 2: Moniciones para cada
lectura
Primera lectura (Jeremías 31, 31-34)
Dios
anuncia el nuevo pacto que sellará con su pueblo, donde los pecados
desaparecerán y la nueva ley llegará a nuestra vida por mano del Señor. Escuchemos atentamente.
Segunda lectura (Hebreos 5, 7-9)
Jesús
aceptando su muerte redentora por fidelidad al plan de Dios, obtuvo para
nosotros la salvación. Pongamos
atención
Evangelio (Juan 12, 20-33)
El
Evangelio, nos recuerda que sólo, si el grano muere, da fruto. Nos ponemos de
pie para escuchar el evangelio.
ORACIÓN DE LOS FIELES
Presentamos
nuestras intenciones a Dios, y pidámosle que mire con amor a su pueblo que le
suplica. Digamos:
“SEÑOR, REFUGIO NUESTRO, ESCÚCHANOS”
Para
que la Iglesia en todas partes del mundo profundice su acción evangelizadora.
Oremos al Señor.
Para
que el Papa, Obispos y Sacerdotes sean fieles a su ministerio y acompañen al
pueblo de Dios en su camino de fe. Oremos al Señor.
Para
que quienes tienen responsabilidad en el gobierno, respeten la vida, la
justicia y la verdad y busquen sinceramente el bien de todos. Oremos al Señor.
Para
que en nuestro país prevalezca la preocupación constante por los más
necesitados. Oremos al Señor.
Para
que la Cruz de Cristo no sea para nosotros motivo de curiosidad, indiferencia,
o mera compasión, sino la meta cristiana que nos transforme interiormente.
Oremos al Señor.
Para
que tantas familias que sufren carencias materiales o espirituales, por el
sacrificio de este tiempo, expresado en nuestra ayuda solidaria, puedan
descubrir tu infinito amor, Oremos al Señor.
Para
que todos los que sufren la esclavitud del pecado, se acojan a la misericordia
del Padre y se acerquen al sacramento de la reconciliación. Oremos al Señor.
Para
que todos nosotros descubramos la ley que Dios puso en nuestros corazones y la
vivamos a ejemplo de Jesús, Oremos al Señor.
PRESENTACIÓN DE LAS OFRENDAS
Con
el pan y el vino, ofrezcamos al Señor nuestros sufrimientos, con los que nos
unimos a su cruz. Entreguémosle también nuestro corazón quebrantado y humillado
para que él nos lo renueve. Cantemos...
COMUNIÓN
Cristo
es el Pan que baja del cielo para darnos una vida nueva y eterna. Unidos en un
solo amor vayamos a recibirlo en la comunión, cantando …
COMUNIÓN ESPIRITUAL:
Al término de la distribución
de la comunión.
Hermanos: Todos aquellos que no han podido acercarse a
recibir a Jesús Sacramentado, pueden hacer la Comunión Espiritual rezando la
siguiente oración:
Creo Señor mío que estás
realmente presente
en el Santísimo
Sacramento del altar.
Te amo sobre todas las
cosas y deseo
ardientemente recibirte
dentro de mi alma;
pero, no pudiendo
hacerlo ahora sacramentalmente,
ven al menos
espiritualmente a mi corazón.
Y como si te hubiese
recibido, me abrazo
y me uno todo a Ti;
Oh Señor, no permitas
que me separe de Ti.
Amén.
DESPEDIDA
Con
El gozo de sabernos amados por Dios, vayamos a compartir con nuestro prójimo el
mensaje que hoy hemos recibido.