23º DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO
Queridos
hermanos, nos reunimos nuevamente para el Banquete Eucarístico, en este XXIII
Domingo del Tiempo Ordinario. Las lecturas de hoy nos confirman que Dios sigue
siendo el cercano, y su proyecto salvador continúa, y su poder curativo sigue
manifestándose, aunque también nos invitan a que colaboremos nosotros con
nuestro esfuerzo para vencer al mal, en tdos los órdenes. Sintiendo esa
cercanía de Dios, de pie cantemos con gozo para comenzar esta Santa Misa.
MONICIONES A LAS LECTURAS
OPCIÓN 1: MONICIÓN ÚNICA PARA
TODAS LAS LECTURAS
En
consonancia con las lecturas del domingo pasado, la palabra del profeta Isaías
y la de Jesús convergen hoy en anunciar la liberación frente a todas las
servidumbres, en ser Buena Noticia para todos que elimina las trabas y los
miedos. También hoy el Señor nos habla a cada uno de nosotros y viene a
ofrecernos una palabra gozosa, liberadora y llena de esperanza. Escuchémosla
con mucha atención.
OPCIÓN 2: MONICIONES PARA CADA
LECTURA
PRIMERA LECTURA (Isaías 35, 4-7a)
El
pueblo de Israel estaba en una situación dramática, que parecía sin remedio.
Pero el profeta le asegura la cercanía de Dios y su voluntad de curar todos sus
males.
SEGUNDA LECTURA (Santiago 2, 1-5)
El
apóstol Santiago nos recuerda que no debemos tener predilecciones con los ricos
y poderosos, antes bien debemos dar el mejor lugar al necesitado. Escuchemos
con atención
EVANGELIO (Marcos 7, 31-37)
En la
sanación del sordomudo comienza a realizarse la esperanza mesiánica anunciada
por el profeta Isaías. Lo escucharemos del Evangelio de San Marcos, pero antes
cantemos el aleluya.
ORACIÓN DE LOS FIELES
Padre, hoy hemos visto como tu hijo abrías los oídos a un
sordo. Nosotros también nos sentimos sordos y ciegos ante tu presencia. Por
eso, te pedimos:
ÁBRENOS EL ENTENDIMIENTO
SEÑOR.
ü Por la Iglesia, para que el
Señor le conceda la paz y la unidad y para que siga anunciando el Evangelio por
todo el mundo, a pesar de que éste no lo quiera oír. Roguemos al Señor.
ü Por el Papa, para que atento
al mensaje del Evangelio, lo transmita con fidelidad y fortaleza, el mensaje de
Dios para este mundo. Roguemos al Señor.
ü Por la paz del mundo, para que
cesen las rivalidades entre las naciones, renazca en el corazón de los hombres
el amor y arraigue entre todos los pueblos la mutua comprensión, Roguemos al
Señor.
ü Por los gobernantes de las
naciones, para que abran sus oídos y escuchen el clamor de los más necesitados
y atiendan sus peticiones. Roguemos al Señor.
ü Por los que están enfermos, por
los necesitados, los encarcelados, por los que sufren algún mal en el mundo
para que encuentren a su lado Alguien que les abra los oídos a la palabra
salvadora de Dios. Roguemos al Señor.
ü Por los que se han alejado en
la fe o están en un tiempo de oscuridad, para que haya hermanos que los lleven
a la presencia de Jesús, el único que puede curarles. Roguemos al Señor.
ü Por los matrimonios cristianos
para que renueven constantemente su confianza en Aquel que todo lo puede. Roguemos
al Señor.
ü Pedimos también por nosotros,
nuestros familiares y amigos para que Dios nos acompañe siempre y estemos
atentos a su voz. Roguemos al Señor.
ü Para que el Señor nos conceda
perseverar en la fe y, después de la muerte, nos admita en el Reino de la
felicidad, de la luz y de la paz.
Roguemos al Señor.
ü Por nuestra comunidad, para
que vaya creciendo cada vez más en la vivencia de la Palabra que en cada misa
escuchamos. Roguemos al Señor.
Suprimir o añadir intenciones, según las necesidades de la Iglesia
local
PRESENTACIÓN DE LAS OFRENDAS
La
Palabra hoy nos ha dicho que Jesús "todo lo ha hecho bien", por eso,
junto al pan y el vino, presentemos también nuestra acción de gracias.
Cantemos.
COMUNIÓN
"Jesús
proclamaba el Evangelio del reino, curando las dolencias del pueblo". En el
Pan que hoy comeremos también sigue obrando con poder, con su presencia real.
Acerquémonos a comulgar con fe y devoción cantando.
COMUNIÓN ESPIRITUAL:
Al término de la distribución de la comunión.
Hermanos:
Todos
aquellos que no han podido acercarse a recibir a Jesús Sacramentado, pueden
hacer la Comunión Espiritual rezando la siguiente oración:
Creo
Señor mío que estás realmente presente
en el
Santísimo Sacramento del altar.
Te
amo sobre todas las cosas y deseo
ardientemente
recibirte dentro de mi alma;
pero,
no pudiendo hacerlo ahora
sacramentalmente,
ven
al menos espiritualmente a mi corazón.
Y
como si te hubiese recibido, me abrazo
y me
uno todo a Ti;
Oh
Señor, no permitas que me separe de Ti.
DESPEDIDA
No podemos callar ante el mundo la buena noticia que hoy hemos escuchado. Solo poniendo a Dios al centro de nuestra vida, podremos alcanzar esa felicidad que, a veces sin saber estamos buscando.
Padre
de bondad infinita, acoge estas necesidades que te presentamos por medio de tu
Hijo, y haz que el Espíritu Santo nos espabile el oído para que percibamos
nítido tu mensaje. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.