GUION DE MISA -31º DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO C 3/11

31º DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO C        3/11


Queridos hermanos, Celebramos hoy el domingo trigésimo primero del tiempo durante el año, y en él celebramos nuestro encuentro con el Señor, que nos convoca para darnos a conocer de una manera sencilla y comprensible, su amor inagotable y su deseo de comunicarnos su vida y su perdón.
Jesús nos busca hasta el lugar y el estado en que nos encontremos. No le importa la opinión de los demás. Él viene a buscar y a salvar lo que estaba perdido. Esto nos anima a todos, que somos pecadores y necesitamos de esta misericordia de Dios, a confiar en él. Jesús quiere mostrar el amor de su Padre y nos invita a su Eucaristía..
Ansiosos de encontrarnos con Dios y recibir muestras de su misericordia, iniciemos con devoción la celebración de estos misterios. De pie, cantamos.

MONICIONES A LAS LECTURAS

OPCIÓN 1: MONICIÓN PARA TODAS LAS LECTURAS

Amor, fidelidad, compasión, ternura y, en última instancia, salvación son palabras clave con las que las lecturas de hoy describen las relaciones entre Dios y el ser humano. El pasaje del libro de la Sabiduría nos muestra a Dios como “amigo de la vida”, con lo que nos reconforta y llena de esperanza. El salmista, por su parte, proclama a Dios como rey y Señor, pero deja bien claro que esa realeza y ese señorío radican esencialmente en su amor y su fidelidad a las criaturas. En el Evangelio de hoy Jesús, el Hijo, encarna en su persona el amor y la fidelidad del Padre.

OPCIÓN 2: MONICIÓN PARA CADA UNA DE LAS LECTURAS

PRIMERA LECTURA Sabiduría 11, 22—12, 2
 En el Libro de la Sabiduría hace una lectura de la historia, a la luz del principio del amor como explicación de todo lo creado: todo es precioso a los ojos de Dios. Escuchemos.

SEGUNDA LECTURA   2 Tesalonicenses 1, 11—2, 2
San Pablo comienza a introducirnos en el ambiente escatológico y hace una serie de adver-tencias a los Tesalonicenses, sobre el final de los tiempos.

EVANGELIO Lucas 19, 1-10
 El amor y perdón de Dios se hacen visibles en Jesucristo, que acogía a los pecadores y hacía banquetes con ellos. Hoy vemos el caso de Zaqueo. Para recibir este mensaje, de pie,  cantemos el aleluya.

ORACIÓN DE LOS FIELES
A cada intención respondemos: TE LO PEDIMOS, SEÑOR, QUE AMAS LA VIDA

     Por la Santa Iglesia y el Papa Francisco, para que siempre anuncie con su palabra y con sus obras, el amor misericordioso de Dios, que quiere comunicarnos su vida y su perdón, oremos...
     Por nuestro Obispo y nuestros sacerdotes, para que por el ejercicio de su ministerio, podamos obtener la reconciliación, la grandeza, el perdón, la comprensión y la amistad de Jesús, oremos...
     Por nuestra Patria, para que todos, gobernantes y gobernados, busquemos por sobre todo, el bien común y la unión entre todos, oremos...
     Por tantos hermanos nuestros que se encuentran sufriendo, para que puedan encontrar en la fe no sólo el consuelo, sino una liberación y una fuerza que los llene de esperanza, oremos...
     Por los que este día nos reunimos en torno al altar de Dios, para que la Palabra que Dios nos ha transmitido nos sirva de consuelo y nos anime a cambiar nuestro estilo de vida y ajustarlo al plan de Dios, oremos.
     Por nosotros, que hemos celebrado a Todos los Santos y Santas y recordado a los queridos difuntos que han peregrinado hacia tu casa de Padre, para que vivamos con esperanza, oremos…

PRESENTACIÓN DE LAS OFRENDAS
Estos dones del pan y del vino, se transformarán en el Cuerpo y la Sangre de Jesús; en ellos ofrezcamos nuestro sincero deseo de tener un encuentro con Él, que transforme verdadera-mente nuestras vidas. Cantemos …

COMUNIÓN
 "Hoy tengo que alojarme en tu casa", dijo Jesús a Zaqueo. También quiere alojarse en nuestra casa y lo podemos recibir, acercándonos a comulgar. Cantemos.

COMUNIÓN ESPIRITUAL:
Al término de la distribución de la comunión.
 
Hermanos:
Todos aquellos que no han podido acercarse a recibir a Jesús Sacramentado, pueden hacer la Co-munión Espiritual rezando la siguiente oración:
 
Creo Señor mío que estás realmente presente
en el Santísimo Sacramento del altar.
Te amo sobre todas las cosas y deseo
ardientemente recibirte dentro de mi alma;
pero, no pudiendo hacerlo  ahora sacramentalmente,
ven al menos espiritualmente a mi corazón.
Y como si te hubiese recibido, me abrazo
y me uno todo a Ti;
Oh Señor, no permitas que me separe de Ti.
Amén.

DESPEDIDA
Que el amor manifestado por Dios hacia nosotros lo podamos llevar a los desamparados del mundo. Vayamos a vivir la Palabra escuchada. Cantemos

Te seguiré, Jesús, a donde me lleves,
sin adelantarme, sin forzar el paso.
Sabiamente ignorante, iré adonde no sé,
puesto el corazón en Ti, te seguiré.