GUION DE MISA 27º Domingo DURANTE EL AÑO 4/10


27º Domingo DURANTE EL AÑO    4/10

Hermanos: Celebramos hoy el vigésimo séptimo domingo durante el año, y nos reunimos al-rededor de la mesa del Señor, para ser alimentados por Él, que a pesar de nuestras constantes infidelidades, nos demuestra siempre  que no nos abandona. El Señor, que nos hace entender su mensaje por medio de parábolas. Hoy nos dice que si nos sentimos abandonados, no es porque Él nos haya dejado, sino porque somos nosotros los que lo hemos abandonado. Él confía su Reino al pueblo fiel, pero nos advierte que a su tiempo nos pedirá los frutos que como nuevo pueblo de Dios debemos producir. De pie, nos disponemos a comenzar esta celebración cantando...

MONICIONES A LAS LECTURAS
OPCIÓN 1: MONICIÓN ÚNICA PARA TODAS LAS LECTURAS

En las lecturas de hoy,  Isaías nos cuenta la relación de Dios con su pueblo como la historia de un amor no correspondido. El evangelio mantiene la imagen de la viña, en este caso como el Reino entregado al pueblo de Israel. Éste no da los frutos esperados y maltrata y asesina a los enviados de Dios, terminando con su propio Hijo. Pablo, testigo de la nueva alianza, anima a los filipenses a abrirse al amor del Dios de la paz viviendo como verdaderos discípulos de Cristo.

OPCIÓN 2: MONICIONES PARA CADA LECTURA
1ª. LECTURA:        (Is 5, 1-7)        
Este notable poema describe toda la historia de las múltiples manifestaciones de la fidelidad de Dios para con su pueblo y, por otra parte, las infidelidades de Israel.

2ª. LECTURA:     (Flp 4, 6-9)   
San Pablo, desde su situación de prisionero, nos dice que para tener paz es necesario orar con acción de gracias y suplicar para dar a conocer nuestras peticiones.

EVANGELIO:   (Mt 21, 33-43)
Jesús, es una parábola, nos anuncia que como nuevo pueblo de Dios, deberemos entregar los frutos a su tiempo. De pie cantamos el aleluya.

ORACIÓN DE LOS FIELES:
GUÍA:  A cada una de las peticiones responderemos:  "SEÑOR, AYÚDANOS A SER FIELES A TU AMOR"
    Por nuestra Santa Madre, la Iglesia Católica, para que siga produciendo buenos frutos para el Reino de los Cielos, te pedimos…
    Porque queremos, con el ejemplo del Papa Francisco, escuchar la voz de Dios que nos invita a trabajar en su viña y la voz del pueblo de Dios que espera de nosotros una ac-titud más evangélica, te pedimos…
    Porque deseamos construir, con nuestros Obispos y nuestros sacerdotes, una Iglesia diocesana que dé frutos de solidaridad, sobre todo hacia los más necesitados, te pe-dimos…
    Para que podamos construir una patria en la que el fundamento vuelva a ser tu Hijo, y los valores de nuestra vida y de nuestra sociedad, los de su Evangelio, te pedimos…
    Para que nuestros hermanos que sufren, que están solos, que no tienen nada, sientan tu amor misericordioso y providente por nuestra ayuda concreta, te pedimos…
    Para que nuestra comunidad, reconociendo el carisma recibido de Dios, no lo entierre sino que cada cual, dando testimonio de seguimiento y fidelidad,  aporte su granito en la construcción del Reino, te pedimos…

PRESENTACIÓN DE LAS OFRENDAS:
Porque realmente queremos ser siempre fieles a nuestro Padre, y verdaderos constructores de su Reino de amor, manifestémoslo en un ofrecimiento sincero, junto a estas ofrendas de pan y vino,  cantando...

COMUNIÓN:
Hoy hemos escuchado que el Reino de Dios nos ha sido entregado, como nuevo pueblo de suyo, pero también se nos ha advertido que Él espera nuestros frutos; y en esa tarea, Cristo es el alimento que posibilitará que realmente demos esos frutos. Cantamos...

COMUNIÓN ESPIRITUAL:
Al término de la distribución de la comunión.

Hermanos:
Todos aquellos que no han podido acercarse a recibir a Jesús Sacramentado,
pueden hacer la Comunión Espiritual rezando la siguiente oración:

Creo Señor mío que estás realmente presente
en el Santísimo Sacramento del altar.
Te amo sobre todas las cosas y deseo
ardientemente recibirte dentro de mi alma;
pero, no pudiendo hacerlo  ahora sacramentalmente,
ven al menos espiritualmente a mi corazón.
Y como si te hubiese recibido, me abrazo
y me uno todo a Ti;
Oh Señor, no permitas que me separe de Ti.
Amén.

DESPEDIDA:
Al concluir nuestra celebración dominical, no olvidemos que cada uno de nosotros, como Igle-sia, como nuevo pueblo de Dios, debemos producir frutos; es necesario que nuestra comuni-dad produzca frutos, que son, ante todo, el amor.  Nos despedimos cantando...