Familia Gianellina

Colegio del Huerto de Buenos Aires

A l poco tiempo, fue destinada al colegio del Huerto de Buenos Aires. ¿Qué tareas se le asignaron? Vivir junto a las niñas, instruirlas en el catecismo, enseñarles corte y confección, bordado, acondicionamiento de vestimentas. Se la veía siempre alegre. En el patio, en la clase, en la Iglesia, en el Huerto, con las niñas, con las hermanas… su rostro irradiaba alegría.
Su disponibilidad era constante. Cuando una hermana de enfermaba, inmediatamente se ofrecía remplazarla: “Madre, yo puedo… si usted quiere… si hace falta…” durante el recreo, participaba en los juegos de las niñas con gusto y alegría. Aceptaba las órdenes y las correcciones sin irritarse o resentirse.