24 DE DICIEMBRE
VIGILIA DE LA NATIVIDAD DEL SEÑOR
“Hoy sabrán que el
Señor viene a
salvarnos, y mañana
verán aparecer
su gloria”.
ANTÍFONA
DE ENTRADA Cf. Ex 16, 6-7[1]
UN HIJO SE NOS HA DADO…
“Quien tiene un niño pequeño sabe cuánto amor y
paciencia se necesitan. Es necesario alimentarlo, atenderlo, limpiarlo, cuidar
su fragilidad y sus necesidades, que con frecuencia son difíciles de
comprender. Un niño nos hace sentir amados, pero también nos enseña a amar.
Dios
nació niño para alentarnos a cuidar de los demás. Su llanto tierno nos hace comprender lo inútiles
que son nuestros muchos caprichos, y de esos tenemos tantos. Su amor indefenso,
que nos desarma, nos recuerda que el tiempo que tenemos no es para auto
compadecernos, sino para consolar las lágrimas de los que sufren.
Dios
viene a habitar entre nosotros, pobre y necesitado, para decirnos que sirviendo
a los pobres lo amaremos.
Desde esta noche, como escribió una poetisa, «la residencia de Dios está junto
a mí. La decoración es el amor» (E. Dickinson, Poems, XVII).”[2]
“Aleluia. Mañana
quedará borrada la
iniquidad de la tierra,
y reinará sobre
nosotros el Salvador
del mundo. Aleluia”
ALELUIA[3]
[1] Liturgia Cotidiana 2021. Editorial San Pablo.
[2] NATIVIDAD DEL SEÑOR; HOMILÍA DEL SANTO PADRE FRANCISCO; Basílica
Vaticana; Librería Editrice vaticana.
[3] Liturgia Cotidiana 2021. Editorial San Pablo.