FAMILIA GIANELLINA
PARA TODO EL MES DE OCTUBRE
FAMILIA GIANELINA…UN DON QUE GENERA
COMUNIÓN[1]
“El
Espíritu Santo no sólo se manifiesta a través de una sintonía de sonidos que
une y compone armónicamente las diferencias, sino que se presenta como el
director de orquesta que interpreta la partitura de las alabanzas de las
grandes obras de Dios”
PP. Francisco[2]
LOS
MIEMBROS DE LA FAMILIA GIANELLINA VIVIMOS LA COMUNIÓN…
Caminamos
en la espiritualidad de la comunión, con un peculiar espíritu de familia.
Dios
nos ha revelado que Él es amor, que no es soledad; Dios es familia, es
comunión… y nosotros somos hijos de ese Dios Trinitario, de ese Dios Familia,
que nos enseña a salir de nosotros mismos para ir al encuentro de los demás y
vivir la dinámica del mismo ser de Dios.
Como Gianellinos seguimos a Cristo, tras las huellas de
Gianelli, viviendo el carisma de la “Caridad Evangélica Vigilante” en la
Iglesia. Somos una familia Carismática que en su vivir y actuar diario cada uno
en su vocación específica, aspira a llegar a la santidad, haciendo el bien. La
comunión entre laicos, Religiosas y Sacerdotes, nos complementa y enriquece.
¡EN
LA FG SOMOS HIJOS DEL MISMO PADRE!
“Una
familia en la que un miembro no es más importante que otro, ni por edad, ni por
inteligencia, ni por sus capacidades, porque todos son hijos amados del mismo
Padre. El ejemplo del cuerpo que nos da san Pablo es muy ilustrativo en este
sentido (cf. 1 Co 12,12-26). El cuerpo tiene necesidad, un miembro necesita del
otro. ¡Todos juntos!”[3]
Feliz la Familia
Gianellina, si «como un árbol plantado junto al agua, extiende sus raíces hacia
la corriente» (Jer. 17, 7)
SAN ANTONIO GIANELLI,
ESTÁ PRESENTE EN LA FG
“San
Antonio María Gianelli, desde los inicios de su ministerio sacerdotal,
consideró de gran valor la colaboración activa y constructiva de los sacerdotes
y de los laicos con los que se relacionó durante los años de su ministerio como
sacerdote, párroco, fundador y obispo. El lenguaje de la Iglesia, del tiempo
histórico en que vivió, no hacía referencia explícita a la palabra “comunión‟,
como lo hacen los documentos más recientes del Magisterio de la Iglesia.
Gianelli, adelantándose a su época, vivió la pasión por la unidad y la comunión
y la recomendó vivamente a sus hijas. Leyendo las memorias del nacimiento del
Instituto, se percibe claramente la importancia que le daba el Fundador a la
espiritualidad de la comunión, no solo en la vida sacerdotal y religiosa, sino
también en las familias que estaban a su alrededor. Nosotros sabemos, como lo
sabía Gianelli en su tiempo, que toda vocación proviene de Dios. Él nos tiene
señalado, desde toda la eternidad, una misión que cumplir en el mundo y en la
iglesia, en comunión y complementándonos en las diversas vocaciones”[4].
PARA RECORDAR…FECHAS
DE LA FAMILIA GIANELLINA
“Como Familia Gianellina contamos con días específicos, para
orar y celebrar, el gozo de ser parte de un camino que lleva a la comunión y a
la santidad en la Congregación y en la Iglesia.
• El 21 de octubre, celebramos el día internacional de la
Familia Gianellina, fecha en que Antonio Gianelli fue proclamado Santo, en el
año 1951, por el Papa Pío XII.
• El 21 de cada mes oramos por la Familia Gianellina, por la
Iglesia y el mundo”[5].
¿QUÉ NOS INSPIRA EL
ESPÍRITU DE FAMILIA EN LA FG?
…“Nos
ayuda a vivir en comunión con la Iglesia, Pueblo de Dios, y con todos los que
caminan con nosotros para construir un mundo mejor.
…Nos
enseña a compartir, a buscar momentos de comunicación, espacios y tiempos para
vivir la fe, la oración y la misión.
…Nos
hace confiar en el otro y dar lo mejor de nosotros mismos.
...
Nos inspira las actitudes que nos caracterizan.
...
Nos enseña a cultivar las virtudes del perdón, de la sencillez evangélica, del
amor al trabajo, de la gran confianza en Dios, de la oración continua, de la
alegría, del servicio, de la paciencia... valores y virtudes que nutren nuestra
vida y nos ayudan a crecer en profundidad”[6].
EN LA FG ELEGIMOS A MARÍA, QUE NOS REÚNE COMO HIJOS
“Estamos
ciertos de tener en María una tierna y amorosísima Madre (...) que busca y
quiere siempre el bien de nuestras almas y de nuestros cuerpos (...) y se
preocupa de ello (...) aunque nosotros no pensemos o ni siquiera nos demos
cuenta....”[7]
“María, elegida por
Gianelli para sus hijas como Madre, es también para la Familia Gianellina:
„huerto y jardín‟, donde floreció Jesús, a la que miramos, imitamos, invocamos
y damos a conocer. María es nuestro modelo. Ella abre su vida para que Dios la
modele como arcilla entre sus manos: “Hágase en mí, según tu palabra.”[8] Primera discípula,
guardaba todas las cosas, meditándolas en su corazón. Como Ella, que visitó a
Isabel, se gozó de su compañía, estuvo atenta a los novios en Caná, y ofreció
su ayuda para la elaboración del buen vino, oró junto a los apóstoles cuando
fueron plenificados por el Espíritu Santo, también nosotros deseamos vivir la
caridad evangélica vigilante, estando atentos para salir y acudir presurosos al
encuentro de las necesidades de los demás”[9].
MARÍA,
MODELO DE VIDA EN LA FAMILIA GIANELLINA
“Es para nosotros
modelo de vida sencilla y laboriosa. Junto a ella y a San José, Jesús aprende a
relacionarse, a ver el mundo y a llevar adelante su misión. Como Gianellinos
enamorados de María, evangelizamos con la presencia en nuestras familias, en
los lugares de trabajo, en el encuentro con los amigos y vecinos, hacemos
visible el rostro materno de la Iglesia al estilo de nuestra Madre, María del
Huerto. Con una confianza especial en María, procuramos que nuestras relaciones
estén impregnadas de su ternura y cercanía. Buscamos ir a Cristo a través de su
amor de Madre porque la devoción a ella nos centra en Jesús y nos sostiene en
el camino del Evangelio”[10].
CONOZCAMOS LOS
ELEMENTOS CONSTITUTIVOS DE LA FG[11]
EN LA FAMILIA GIANELLINA…
[1] FG.
Un don que genera comunión. Roma 2020.
[2] PAPA FRANCISCO.
Audiencia general del 19 de junio. Roma, 2019.
[3] Papa
Francisco. Discurso Aula Pablo VI Sábado, 8 de junio de 2019
[4] FG.
Un don que genera comunión. Roma. 2020. Pág.6
[5] Ídem. Pág. 20.
[6] Ídem. Pág. 7.
[7] BIGNAMI, Hna. Onorina. María Mujer
Maravillosa, palabras de S.A.G en Chiavari, 2 de junio de 1821. Ediciones
Gianellinas. Bs. As, 1992.
[8] Evangelio de Lc. 1,38
[9] FG.
Un don que genera comunión. Roma. 2020. Pág 8.
[10] Ídem.
[11] Cfr. FG.
Un don que genera comunión. Roma. 2020. Pág 7.