17 DE SEPTIEMBRE:
DÍA DEL PROFESOR
“Somos hombres y
mujeres con capacidad de infinito, con conciencia crítica, con hambre de
justicia y fraternidad. Con deseos de saber para no ser manipulados, con gusto
por la fiesta, la amistad y la belleza”.
Papa Francisco
GIANELLI FORMADOR, MODELO DEL PROFESOR HUERTANO
Antonio
Gianelli tenía un deseo que lo animaba: “formar
al cristiano íntegro. Por esto no hablaba en estilo rebuscado, ni usaba vuelos
poéticos, sino la sencillez y claridad apostólicas, amor profundo por las
almas, amor que brillaba en sus ojos, animaba sus palabras y vibraba en su
corazón”[1]
Hoy los profesores, ante las
problemáticas cotidianas y por su anhelo de estar al corriente con la ciencia y
la tecnología, necesitan de un modelo pedagógico estable, que encierre valores,
que los potencie para ser testigos de la Verdad, a imagen de San Antonio María
Gianelli.
La
formación integral de nuestros estudiantes es la meta y la formación integral
de quien los tiene a cargo también debe serlo como antesala del dar lo que uno
posee.
El corazón, las manos, las huellas
de los pies de los profesores huertanos pueden ser diversas, por la inmensidad
de dones que albergan, pero dejan impresa la armonía e integridad, en la tarea
donde quedan plasmados.
La misión del formador es difícil y
bella, para enfrentar todo tipo de ignorancia espiritual y del mundo. Gianelli
“temía la ignorancia en la que fermentaban todos los malos hábitos y las más
deplorables perversiones; en cambio ansiaba no sólo dar a conocer las verdades
de la fe, sino hacer sentir y amar la vida de fe sin compromisos entre Dios y
el mundo”[2].
Esta búsqueda continua de la verdad
a través del conocimiento, es un llamado a cumplir con el mandato: “ustedes
tienen que lavarse los pies unos a otros”…La generosidad de lavar y dejarse
lavar, propia de quien son los servidores de todos. La capacidad de abajarnos
para hacernos cargo de las miserias y de la intimidad del hermano. La humildad
de quien se siente pobre y necesitado del hermano, que limpia y sana las
heridas que va dejando el camino”[3].
¿Pueden los profesores gianellinos sostener estos ideales? La respuesta está en
corazón de cada uno y seguramente
crecerá en la medida que quiera parecerse al modo de ser, de sentir y de
obrar de nuestro santo, Gianelli. La decisión es para hoy. No se puede dilatar.
Estalla y quema.
¡Feliz día del
profesor!
[1] Bergoglio; Jorge Mario; Educar, Testimonio de la Verdad; Editorial
Claretiana; Buenos Aires; 2014.
[2] FMH; 1994. San Antonio María Gianelli, Obispo y fundador de las
Hermanas de Caridad, Hijas de María Santísima del Huerto; Ediciones
Gianellinas; Argentina.
[3] FMH; Manual de vida Gianellina 1; Ediciones Gianellinas; Paraguay;
2012