27 DE SEPTIEMBRE
SAN VICENTE DE PAÚL
“La caridad que está dispuesta a hacerse anatema por la
salvación de su hermano no permite treguas, no aguanta dilaciones, no conoce
lentitudes…”[1]
MEMORIA OBLIGATORIA
“En la Francia del siglo XVII,
Vicente de Paúl dio un nuevo rostro a la Iglesia con su labor por la
dignificación del clero, el compromiso hacia los pobres, la religiosidad
cercana al corazón de la gente sencilla, y el buen humor. De familia campesina,
nació en la Gascuña en el año 1581. Ordenado sacerdote, entró en contacto con
eclesiásticos como Pedro de Bérulle y Francisco de Sales, y se sintió tocado
por la pobreza presente por todas partes, y por la poca ejemplaridad del clero.
De todo ello nacerá una gran actividad organizadora: creará la Congregación de
la Misión, de sacerdotes y luego con Luisa de Marillac, la de las Hijas de la
Caridad, de religiosas. Murió en París en el año 1660”[2].
ORACIÓN
“ Señor, tú que adornaste a
San Vicente de Paúl con las cualidades de un verdadero apóstol, para que se entregara
al servicio de los pobres y a la formación de los ministros de tu Iglesia,
concédenos a nosotros que, animados por un celo semejante al suyo, amemos lo
que él amó y practiquemos lo él enseñó. Por nuestro Señor Jesucristo. Amén.”[3]
[1] Hna Rausch, M y Magrini, R. Meditemos con San Antonio Gianelli…una
frase para cada día del año; 2010. Pág. 42.
[2] Centro de Pastoral Litúrgica; El santoral, sugerencias y materiales;
Barcelona; 2007; pág.179.
[3] Liturgia de las Horas para los fieles; Ágape; Laudes, Vísperas y
Completas; Versión Litúrgica Oficial; Desclee de Brouwer, SA; Barcelona;
España; 2007. Pág. 978.