Familia Gianellina

1 DE SEPTIEMBRE: JORNADA MUNDIAL DE ORACIÓN PRO EL CUIDADO DE LA CREACIÓN

1 DE SEPTIEMBRE: JORNADA MUNDIAL DE ORACIÓN PRO EL CUIDADO DE LA CREACIÓN

 

El primer día de septiembre la familia cristiana celebra la Jornada mundial de oración por el cuidado de la creación, con la que comienza el Tiempo de la Creación, que finaliza el 4 de octubre, en memoria de san Francisco de Asís. En este período, los cristianos renuevan en todo el mundo su fe en Dios creador y se unen de manera especial en la oración y tarea a favor de la defensa de la casa común.”

Papa Francisco[1]

«CREO EN DIOS, PADRE TODOPODEROSO,
CREADOR DEL CIELO Y DE LA TIERRA»[2]

 

             El Santo Padre “exhorta a considerar que la Creación es un don maravilloso de Dios para que sea utilizado en beneficio de todos. Es necesario comenzar por nuestra vida cotidiana si queremos cambiar estilos de vida y reducir el despilfarro, conscientes de que también los pequeños gestos pueden garantizar la sostenibilidad y el futuro de la familia humana”[3].

 

ALGUNAS PREGUNTAS PARA REFLEXIONAR A PARTIR DEL MENSAJE DEL PAPA FRANCISCO

¿Por qué debemos escuchar a la tierra?

                                            Porque “hoy la voz de la creación nos urge, alarmada, a regresar al lugar correcto en el orden natural, a recordar que somos parte, no dueños, de la red interconectada de la vida”[4].

¿Qué relación hay entre pandemia y cuidado de la casa común?

                                            “La pandemia actual nos ha llevado de alguna manera a redescubrir estilos de vida más sencillos y sostenibles. La crisis, en cierto sentido, nos ha brindado la oportunidad de desarrollar nuevas formas de vida. Se pudo comprobar cómo la Tierra es capaz de recuperarse si la dejamos descansar: el aire se ha vuelto más limpio, las aguas más transparentes, las especies animales han regresado a muchos lugares de donde habían desaparecido. La pandemia nos ha llevado a una encrucijada. Necesitamos aprovechar este momento decisivo para acabar con actividades y propósitos superfluos y destructivos, y para cultivar valores, vínculos y proyectos generativos. Debemos examinar nuestros hábitos en el uso de energía, en el consumo, el transporte y la alimentación. Es necesario eliminar de nuestras economías los aspectos no esenciales y nocivos y crear formas fructíferas de comercio, producción y transporte de mercancías”[5].

 

LA ALEGRÍA DE LA RECONSTRUCCIÓN DE LA CASA COMÚN

                                            “En la tradición bíblica, el Jubileo representa un evento gozoso, inaugurado por un sonido de trompeta que resuena en toda la tierra. Sabemos que el grito de la Tierra y de los pobres se ha vuelto aún más fuerte en los últimos años. Al mismo tiempo, somos testigos de cómo el Espíritu Santo está inspirando a personas y comunidades de todo el mundo a unirse para reconstruir nuestra casa común y defender a los más vulnerables. Asistimos al surgimiento paulatino de una gran movilización de personas, que desde la base y desde las periferias están trabajando generosamente por la protección de la tierra y de los pobres. Da alegría ver a tantos jóvenes y comunidades, especialmente indígenas, a la vanguardia de la respuesta a la crisis ecológica. Piden un Jubileo de la Tierra y un nuevo comienzo, conscientes de que las cosas pueden cambiar.”[6]

 

LAS LÍNEAS PASTORALES Y LA ECOLOGÍA

“Las líneas pastorales presentadas por el Gobierno Provincial[7] surgen de nuestro deseo de sintonizarnos con el Instituto en el tema del XX Capítulo general: “Atentas al mundo con el corazón en Dios” y a la Iglesia universal, en el compromiso con el Pontificado del Papa Francisco, provoca de forma intensa y audaz asumir una Iglesia saliente en una acción pastoral evangelizadora contextualizada y planificada para superar una práctica voluntarista, amateur y pragmática. Por tanto, es necesario trazar el camino que deseamos recorrer. En la tercera línea leemos:

 

“PROMOVEMOS UNA CULTURA ECOLÓGICA QUE RESPETA, AMA Y DEFIENDE LA VIDA EN TODAS SUS DIMENSIONES”

“En esta maraña de desafíos surge el concepto de ecología integral, propuesto por el Papa Francisco en su Encíclica "Laudato Sii - Alabado por cuidar de Nuestra Casa Común, hermana y Madre Tierra". En él, el Papa propone una reflexión sobre la profunda relación que existe entre todas las criaturas de nuestro planeta: “Propongo que nos detengamos ahora a reflexionar sobre los diferentes elementos de una ecología integral, que incluya claramente las dimensiones humana y social” (Laudato Sii, 137), destacando que 'todo está interconectado': la naturaleza y la sociedad que la habita.

Para el Papa Francisco, la ecología no debe asociarse solo con temas obvios como la tala de bosques, la extinción de animales y la contaminación del aire, sino también con las múltiples consecuencias del modelo económico que ha llevado al planeta a su actual estado de degradación social y ambiental. ambiental.

Para él, la ecología también se refiere a las tradiciones perdidas por las comunidades indígenas impactadas por las grandes obras, a los humanos que han sido reemplazados por robots en las industrias y a las personas que viven con ataques de ansiedad y son incapaces de admirar la belleza que les rodea. En definitiva, una ecología integral. (C. 24; C.23; C. 36; C. 37)”[8].

 

ORACIÓN FINAL

CANCIÓN SALMO DE LA CREACIÓN

(Cristóbal Fones)[9]

Por tu océano azul y las aguas del mar, 
 por todo continente y los ríos que van, 
 por el fuego que viste como arbusto ardiente, 

por el ala del viento, quiero gritar: 


 MI DIOS, TÚ ERES GRANDE Y HERMOSO, 
 DIOS VIVIENTE E INMENSO, 
 TU ERES EL DIOS DE AMOR. 
 MI DIOS, TÚ ERES GRANDE Y HERMOSO, 
 DIOS VIVIENTE E INMENSO 
     DIOS PRESENTE EN TODA CREACIÓN. 
  
 Y por los animales de la tierra y el agua, 
 por el canto del ave y el cantar de la vida, 
 por el hombre que hiciste semejante a Ti, 
 y por todos tus hijos, quiero gritar 
  
 Por la mano tendida que te invita a la danza, 
 por el beso que brota al surgir la esperanza, 
 la mirada de amor que levanta y reanima, 
 por el vino y pan, quiero gritar. 
  



[1] PP FRANCISCO (2020); Mensaje del Santo Padre Francisco para la jornada mundial de oración por el                                cuidado de la creación, 1 de septiembre de 2020; Roma; San Juan de Letrán.

[2] CATECISMO DE LA IGLESIA CATÓLICA, Art. 1. Capítulo 1. Creo en Dios Padre.

[3] CONSEJO PONTIFICIO PARA LAICOS, Recuperado de: http://www.laicos.va/content/laici/es/media/notizie/krakow2016-1.html

[4] PP FRANCISCO (2020); Mensaje del Santo Padre Francisco para la jornada mundial de oración por el  cuidado de la creación, 1 de septiembre de 2020; Roma; San Juan de Letrán.

[5] Ídem.

[6] Ídem.

[7] FMH

[8] FMH; Líneas Pastorales 2021.

[9] Santiago, 1975; Sacerdote Jesuita chileno.