3º DOMINGO DE PASCUA
Queridos hermanos, celebramos hoy el tercer domingo de Pascua, y al reunirnos para celebrar la Eucaristía, presentamos a Dios lo que somos, lo que esperamos y lo que vivimos. Después de una larga noche de soledad y fatiga, llega el alba: la luz vence a la oscuridad, el trabajo infructuoso se convierte en pesca fácil y abundante, el cansancio y la soledad se transforman en alegría y paz. Desde entonces, esos mismos sentimientos animan a la Iglesia. Aunque pueda parecer que a veces triunfa el mal y la fatiga de la vida diaria, la Iglesia sabe con certeza que sobre quienes siguen a Cristo resplandece ahora la luz inextinguible de la Pascua. Con gozo y ensalzando al Señor resucitado, cantamos juntos el canto de entrada.
MONICIONES A LAS LECTURAS
OPCIÓN 1: MONICIÓN PARA TODAS LAS LECTURAS
Las lecturas de este domingo continúan centrándose en el misterio pascual que celebramos, subrayando el compromiso testimonial que implica la experiencia de la resurrección de Jesucristo. Testigos son los apóstoles, que proclaman el misterio de la fe cristiana a pesar de las amenazas del Sanedrín. Testigos son “todas las criaturas que hay en el cielo. Testigos somos también nosotros cuando escuchamos la Palabra de Dios con atención.
OPCIÓN 2: MONICIÓN PARA CADA UNA DE LAS LECTURAS
PRIMERA LECTURA (Hechos 5, 27b-32. 40b-41)
El Espíritu Santo vivifica el compromiso apostólico de los discípulos de Cristo, sosteniéndolos en sus pruebas, iluminándolos en sus opciones y asegurando eficacia a su anuncio del misterio pascual.
SEGUNDA LECTURAS (Apocalipsis 5, 11-14)
Escuchemos esta página del Apocalipsis que describe la liturgia del cielo.
EVANGELIO (Juan 21, 1-19)
Jesús que designa a Pedro para que vaya delante del rebaño, siendo el primero en el servicio a los demás. De pie, cantemos jubilosamente el Aleluya.
ORACIÓN DE LOS FIELES
Responderemos: "POR CRISTO RESUCITADO, ESCÚCHANOS SEÑOR"
Por la Iglesia; para que, caminando al paso de la humanidad, sepa llevar a todos la esperanza gozosa de la resurrección en Cristo, Oremos.
Por el Papa Francisco, sucesor de Pedro, para que continúe con valentía cumpliendo la misión de apacentar a las ovejas, auxiliado por el Espíritu Santo, en estos tiempos tan difíciles en los que hay que dar testimonio incluso con la propia vida. Oremos.
Por nuestros Obispos y sacerdotes, para que sean siempre fieles transmisores de la fe, desde su experiencia personal de fe en Cristo resucitado. Oremos...
Por los gobernantes de nuestro país, para que Cristo Resucitado sea el modelo a seguir en la conducción de la nación. Oremos.
Por los que sufren viviendo sin fe, los que caminan sin esperanza, decepcionados, como los dos de Emaús; para que el Señor Jesús camine junto a ellos, abra sus ojos y encienda sus corazones, roguemos al Señor.. Oremos.
Por todas las familias de nuestra comunidad, para que, siendo verdaderas evangelizadoras de la resurrección de tu Hijo, y saliendo al mundo, llenas de alegría, lleven este mensaje a las que aún no lo conocen. Oremos…
Por nosotros, aquí reunidos; para que seamos capaces de reconocerle a él en el prójimo, que camina a nuestro lado, en la sagrada Escritura, en la comida eucarística, al partir el pan. Oremos.
PRESENTACIÓN DE LAS OFRENDAS
Junto al pan y el vino, ofrezcamos al Señor los frutos de la Pascua de Cristo en nuestras vidas. Cantamos.
COMUNIÓN
Acerquémonos, con fe y piedad, a recibir la Eucaristía sabiendo que somos el nuevo pueblo de Dios, que camina hacia la vida verdadwera. Cantamos...
COMUNIÓN ESPIRITUAL:
Al término de la distribución de la comunión.
Hermanos:
Todos aquellos que no han podido acercarse a recibir a Jesús Sacramentado,
pueden hacer la Comunión Espiritual rezando la siguiente oración:
Creo Señor mío que estás realmente presente
en el Santísimo Sacramento del altar.
Te amo sobre todas las cosas y deseo
ardientemente recibirte dentro de mi alma;
pero, no pudiendo hacerlo ahora sacramentalmente,
ven al menos espiritualmente a mi corazón.
Y como si te hubiese recibido, me abrazo
y me uno todo a Ti;
Oh Señor, no permitas que me separe de Ti.
Amén.
DESPEDIDA
Como el Padre envió a Jesucristo, así él nos envía a nosotros ahora para comunicar a todos la Noticia: «Hemos visto al Señor». Dichosos los que crean sin haber visto. Cantando nos retiramos a nuestros hogares
Recordemos que el próximo domingo se llevará a cabo en todo el mundo,
la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones, que nos compromete
a todos los católicos, no sólo a orar, sino a trabajar activamente para promover las
vocacciones,en nuestras familias y en nuestras comunidades..