LITURGIA SEMANAL 32º SEMANA DURANTE EL AÑO

32º SEMANA DURANTE EL AÑO


Lunes, 9 de noviembre     Dedicación de la Basílica de San Juan de Letrán (F)
Juan 2,13-22   ¿Qué señal milagrosa nos muestras para justificar lo que haces?" Jesús respondió: "Destruyan este templo y yo lo reedificaré en tres días".  …  Jesús hablaba de ese Templo que es su cuerpo.

El Evangelio de Juan juega frecuentemente con el doble sentido de las palabras. En el diálogo entre Jesús y los judíos, hay un quiebre en la comunicación. Los judíos entienden por “templo” lo que se aplica solamente al edificio en el cual están parados. Y Jesús, en el Evangelio de hoy, habla de su cuerpo como de un templo, un templo vivo y está profetizando su resurrección.
La Basílica de San Juan de Letrán, es la catedral del Papa, y la fiesta de hoy nos re-cuerda que, como creyentes, somos miembros del pueblo de Dios, la iglesia universal. A veces esto puede llegar a ser una fuente de frustración e incluso de enojo, pero es también la fuente de mucha gratitud y consolación: recibimos la fe porque nos mantenemos vivos en la iglesia, que es la iglesia de los pecadores, pero también de los santos. Pidamos la gracia de ser  capaces de mantener viva nuestra fe y pasarla a los otros que vienen después de nosotros. Oremos hoy de manera especial por el papa Francisco y su misión como nuestro pastor universal.

Martes 10 de noviembre   San León Magno  (MO)
Lucas 17,7-10: Somos unos pobres siervos, hemos hecho lo que teníamos que hacer.

El evangelio de hoy nos presenta una parábola que se encuentra sólo en el evangelio de Lucas. La parábola quiere enseñar que nuestra vida debe caracterizarse por la actitud de servicio. Empieza con tres preguntas y, al final, Jesús mismo da la respuesta. Por eso, como tantas veces, Jesús toma un ejemplo de la vida cotidiana de su tiempo para entregar su mensaje. Los siervos eran quienes debían estar siempre dispuestos a su tarea, sin esperar que hubiera pago o recompensa. De ninguna manera la parábola debe interpretarse como queriendo dar la imagen de un Dios tirano y sin compasión. Sabemos, por el contrario, que Jesús mismo nos revela la imagen de un Dios que se hace «servidor». Esa es nuestra actitud para que se haga realidad el Reino de Dios: hagamos lo que debemos hacer. El Evangelio nos invita a reconocer nuestra realidad de servidores y a vivir en humildad, obrando de acuerdo a esta verdad. Como cristiano, ¿estoy cumpliendo gratuitamente con lo que debo hacer? ¿o lo hago esperando recompensa de parte de Dios?

Miércoles 11 de noviembre   San Martín de  Tours  (MO)
Lucas 17,11-19: “Ninguno volvió a dar gracias a Dios, sino este extranjero?. Y agregó: “Levántate y vete, tu fe te ha salvado”.

El Evangelio de hoy nos presenta la gratitud, que es otro tema muy propio de Lucas: vivir con gratitud y alabar a Dios por todo aquello que recibimos de Él. Esta es la imagen que se desarrolla a la luz de los diez leprosos que fueron curados, y que destaca la figura del samaritano que “consiguió algo más” desde su doble condición de exclusión (enfermo y  extranjero). Él fue capaz de registrar el paso de Dios por su vida y vuelve a Jesús con corazón agradecido. Creer en Jesús nos convierte, nos sana, nos limpia, nos hace criaturas nuevas, hace posible que vivamos para el Reino. En este texto el samaritano representa a las personas que tienen la conciencia clara de que nosotros, los seres humanos, no tenemos mérito, ni crédito ante Dios. Todo es gracia, empezando por el don de la vida, por eso ¿Cómo no vivir en gratitud?.
Vivir en la gratitud es una señal de la presencia del Reino en medio de nosotros.

Jueves 12 de noviembre  San Josafat  (MO)
Lucas 17, 20-25: “ El Reino de Dios está entre ustedes”.
Hoy el evangelio nos trae una discusión entre Jesús y los fariseos sobre el momento de la venida del Reino. Para Jesús, el Reino de Dios ya ha llegado. Ya está en medio de nosotros, independientemente de nuestro esfuerzo o de nuestro mérito. Jesús tiene otra mirada para leer la vida. Hoy nosotros estamos llamados a tener los criterios necesarios para saber discernir dónde se hace presente el Reino de Dios. O lo que es lo mismo: tenemos que estar atentos para saber ver dónde habla Dios y donde Dios se manifiesta.
Jesús dice: “¡El Reino está en medio de ustedes!” ¿Hemos descubierto alguna señal de la presencia del Reino en nuestra vida, en la vida de nuestra gente o en la vida de nuestra co-munidad?

Viernes 13 de noviembre
Lucas 17, 26-37: El día en que se manifieste el Hijo del Hombre.

Hoy el evangelio nos sigue proponiendo la reflexión sobre la llegada del fin de los tiempos; nos trae palabras de Jesús sobre cómo preparar la llegada del Reino. Este tema era y, para algunos, es un asunto candente que causa mucha inquietud y discusión y en ocasiones temor. Jesús nos habla de un final, un tiempo, un día, en que todos sus hijos deberemos encontrarnos con él. No se trata de un destino trágico o de una infeliz espera de un final tenebroso que está próximo a suceder, sino más bien de un llamado a despertar nuestras conciencias dormidas, acomodadas, encerradas en un individualismo sin límites, tomar conciencia para cambiar nuestras actitudes, pensar y actuar como Dios lo quiere para sus hijos. Se nos llama a dejar a un lado nuestro egoísmo, a cambiar de vida y a comprometernos en la construcción del Reino de Dios; así celebraremos el encuentro feliz por haber llegado por fin a nuestra casa eterna.
En este tiempo  ¿cómo estoy preparando la llegada del Reino? ¿de qué necesito liberarme?

Sábado 14 de noviembre
Lucas 18,1-8: “Dios hará justicia a sus elegidos que claman a Él”.

Hoy el evangelio nos enseña un asunto muy importante para Lucas: la insistencia en la oración. Jesús, para poder ser fiel al proyecto del Padre, oraba incansablemente. El texto es bastante claro: quiere enseñarnos a orar siempre y con perseverancia, y a no cansarnos ante las dificultades, incluso cuando parezca que Dios no escucha nuestras plegarias. La imagen de la viuda en la parábola es sugerente pues en Israel, eran símbolo de la debilidad, mientras que un juez injusto parece una contradicción… Si un juez de este tipo es capaz de hacer algo bueno, aunque no sea más que para no ser molestado, ¡Cuánto más hará Dios! En él, no hay contradicción ni incoherencias, solo bondad. Por eso, puede recibir nuestro clamor en todo momento. El ejemplo nos lleva a tener una gran confianza en nuestro Padre Dios.
¿Somos perseverantes en la oración, o abandonamos después de dos o tres intentos?

Domingo 15 de noviembre  (33 durante el año)
Mateo 25,14-30: “…tuve miedo y fui a esconder tu talento bajo tierra. Aquí tienes lo tuyo.» El señor le respondió: «Eres un empleado negligente y holgazán…”

Como lo demuestra la parábola de los talentos, dos servidores se atrevieron a invertir el dinero que recibieron y obtuvieron una buena ganancia; pero el tercero tuvo miedo de perder el capital, lo escondió y se lo devolvió a su señor en cuanto pudo. Nosotros, como los dos prime-ros servidores, también debemos asumir ciertos riesgos por el Reino de Dios, actuando por fe y manteniéndonos despiertos para ver cómo actuará el Señor según la confianza que pongamos en él.
Dios no nos ha dado dones y talentos para enterrarlos ni ser egoístas con ellos. A cada uno le ha confiado una parte en el crecimiento de su Reino para que use productivamente los recursos que él le ha dado. Dinero, aptitudes, tiempo, educación o experiencia, nada hay que no sea útil para ese propósito. Podemos estar totalmente seguros que cualquier iniciativa que emprendamos, si usamos los dones recibidos, contará con la bendición del Señor. Recordemos que lo que Dios desea para su pueblo es muy superior a lo que nosotros mismos deseamos, y que él hará todo lo necesario para llevar el Evangelio hasta los confines de la tierra.

En la medida en que nos entreguemos al Señor veremos muestras de su poder y su gloria. Si nos mantenemos activos y despiertos, la vida será ciertamente una aventura llena de oportu-nidades para usar lo que Dios nos ha dado, y cuando lo hagamos, él obrará maravillas. Este es el noble llamamiento que tú y yo hemos recibido.
“Amado Jesús, te doy gracias por todo lo que me has dado. Enséñame, Señor, a usarlo para tu mayor gloria y el bien de mis hermanos.”


MARÍA, MODELO EN TIEMPOS DE PANDEMIA

María visita de a su prima Isabel,  una mujer que, por muchas circunstancias, ya no tenía futuro: era una anciana, pero Dios que es quien da presente y futuro había contado con ella …
y la Virgen inicia el camino a casa de Isabel
porque cuando Dios entra en la vida de un ser humano,
como en el caso de María,
la vida se pone en dirección hacia los demás’